miércoles, 7 de noviembre de 2007

Para tí.

Supongo que hay cosas que sencillamente no se olvidan, como esa noche del 4 de noviembre, en donde la banda cantaba esa canción en vivo y a mí se me caían las lágrimas como a una pavota. Todavía lloro un poco, y es tonto, porque sé cómo cantar.
Y un día, quizás algún día, la cantaré para tí.


1 comentario:

chica mandarina (con interior azul) dijo...

¿Por qué tu llorabas y yo no me di cuenta? Tal vez fue culpa de la oscuridad y la euforia. Tal vez no tenía que darme cuenta, ¿no?

Te quero! :)